Se despertó por inercia, en su casa no había nadie. Se levantó, preparó una leche con cereales y se fue al colegio.
Tenía evaluación de geografía y no había estudiado, apeló claro a su amplio bagaje de conocimientos heredados de juegos de estrategia y expuso todo lo que pudo.
No encontraba el sentido de ir a clases, de asistir todos los días a las mismas tediosas rutinas, ¿para qué los preparaban? para ser futuros oficinistas, sabiendo por supuesto, cual es la capital de Turquía.
No, no comprendía para qué su mamá lo instaba todos los días a ser responsable, a cortarse el pelo, a hacer la tarea.
No entendía por qué su padre solo se preocupaba por esas décimas que faltaban en su boletín y nunca lo había felicitado por las buenas notas, que seguramente también las había.
Llegó tarde a casa, tiró su bolso en el sillón, se preparó un sándwich y se sentó a jugar un juego en la computadora, cuando sus padres llegaron él ya estaba durmiendo. Ellos trabajan, ellos son responsables.
Otro día, de camino a clases se encuentra con una compañera. Mira en sus ojos infinitos y entonces comprende, entiende todo.
Todo será por ella, la noche, el día, el sueño, la vigilia.
Todo tiene sentido, en ese instante, en ese preciso instante en que se cruzan sus miradas.
Fin, tal vez...
"Por favor compártelo y comenta, mil y un gracias por estar aquí"
https://www.facebook.com/Mirson.Alejandro/
Tenía evaluación de geografía y no había estudiado, apeló claro a su amplio bagaje de conocimientos heredados de juegos de estrategia y expuso todo lo que pudo.
No encontraba el sentido de ir a clases, de asistir todos los días a las mismas tediosas rutinas, ¿para qué los preparaban? para ser futuros oficinistas, sabiendo por supuesto, cual es la capital de Turquía.
No, no comprendía para qué su mamá lo instaba todos los días a ser responsable, a cortarse el pelo, a hacer la tarea.
No entendía por qué su padre solo se preocupaba por esas décimas que faltaban en su boletín y nunca lo había felicitado por las buenas notas, que seguramente también las había.
Llegó tarde a casa, tiró su bolso en el sillón, se preparó un sándwich y se sentó a jugar un juego en la computadora, cuando sus padres llegaron él ya estaba durmiendo. Ellos trabajan, ellos son responsables.
Otro día, de camino a clases se encuentra con una compañera. Mira en sus ojos infinitos y entonces comprende, entiende todo.
Todo será por ella, la noche, el día, el sueño, la vigilia.
Todo tiene sentido, en ese instante, en ese preciso instante en que se cruzan sus miradas.
Fin, tal vez...

https://www.facebook.com/Mirson.Alejandro/
1 comentario:
Y sólo eso.. nos hace ver el mundo de colores
Publicar un comentario